A medida que los adolescentes van adquiriendo una edad, una experiencia y una clara visión de aquello en lo que les gustarĆa trabajar en un porvenir, es imprescindible que desde el profesorado se les apoye y refuerce de cara a su futura salida al mercado laboral. Es aconsejable tener una serie de charlas con ellos, ir adelantĆ”ndoles tĆ©rminos como ānegocioā o āeficienciaā y, en definitiva, introducirles en la medida de lo posible en todo lo relacionado con empresas.
El momento idóneo para ello es hacia el final de la Educación Secundaria Obligatoria. Cuando los alumnos cursan Bachillerato ya han tomado una primera decisión, por lo que es estrictamente necesario que desde el profesorado se otorgue un servicio de orientación previo que debe tener lugar precisamente en la ESO y que debe servir para ayudar a los chavales a decidir por dónde continuar su formación académica.
Mi hijo ha entrado a Bachillerato este mismo año. Aunque las cosas le marchan muy bien y su expediente académico se mantiene perfecto, la decisión acerca de qué hacer una vez terminada la ESO no fue fÔcil. Hace un año, cuando cursaba cuarto de la ESO, no paraba de comentar que no era capaz de decidir si abandonar la enseñanza y empezar a trabajar o si, en cambio, la mejor decisión era continuar estudiando y cursar Bachillerato o Formación Profesional.
Como la percepción de mi hijo era compartida por muchos de sus compaƱeros, en la Asociación de Padres y Madres del instituto decidimos proponer que una orientadora acudiera a impartir una serie de charlas que sirvieran a nuestros hijos para afrontar con mĆ”s claridad una decisión como la que tenĆan que tomar en apenas unas cuantas semanas. La Asociación, con buen criterio, decidió hacernos caso y contactar con una orientadora profesional para que acudiese al centro a impartir aquellas sesiones.
Unos dĆas mĆ”s tarde, Ć©stas comenzaron. El primer consejo de la orientadora fue que alumnas y alumnos adquirieran un libro llamado āDe gira hacia el trabajoā, de Soledad Romero RodrĆguez, que al parecer era una buena guĆa para afrontar una situación como en la que se encontraban. Mi hijo me lo comentó y, al buscarlo por Internet, lo encontrĆ© en la pĆ”gina web de Ediciones Aljibe. Se trataba de una editorial en la que la educación copaba un lugar esencial.
Pude hacerme sin problemas con el libro a travĆ©s de la pĆ”gina web. AdemĆ”s de que no me salió demasiado caro, parecĆa ser una publicación bastante Ćŗtil a juzgar por los contenidos que albergaba en sus pĆ”ginas. Estaba convencido de que entre los consejos de aquel libro y los de la orientadora, mi hijo conseguirĆa clarificar su futuro y dejar de preocuparse tanto por un tema que en ocasiones le habĆa provocado ansiedad.
Unas clases eficaces
No me equivocaba al confiar en esos dos factores. En el par de semanas que duraron aquellas clases, la percepción de mi hijo cambió por completo y si decisión se vio clarificada. Después de seguir los consejos de aquella mujer y de tener en cuenta todo lo que en el libro se recomendaba, decidió continuar estudiando y escogió el Bachillerato en Humanidades y Ciencias Sociales que ofertaba el instituto.
ĀæHa tomado mi hijo la decisión correcta? Tanto Ć©l como yo sabemos que sĆ. Solo tenemos que remitirnos a la buena trayectoria que estĆ” protagonizando desde que comenzó el Bachillerato el pasado mes de septiembre. No para de decir que le gusta lo que hace y que se encuentra a gusto y feliz. Para mĆ, con eso es suficiente.
El futuro es muy caprichoso y le da muchas vueltas a las situaciones. QuizĆ”ā mi hijo pudiese haber optado a un puesto de trabajo que le permitiese tener un sueldo digno en vez de no ganar dinero por seguir estudiando, pero lo que estĆ” claro es que las posibilidades de encontrar un trabajo mucho mejor en el futuro son bastante mĆ”s grandes en la actualidad para Ć©l. Esta formación es fundamental para el futuro de las empresas de nuestro paĆs. Es la llave para asegurar su continuidad y eficacia. Una cantera de la que nutrirse. Un barco que no hay que abandonar.