Me llamo Enrique y vivo con mi esposa Amparo en un pueblo muy pequeñito de la costa andaluza considerado como uno de los más bonitos de España. Estoy muy orgulloso de él y por ello monté hace unos años, tras haber pasado 25 años de mi vida en Francia, un negocio de turismo rural. Pero a día de hoy, y siguiendo los consejos de mi hija Janet, he decidido darle visibilidad a mi negocio en Internet. contratando para ello los servicios de E-ingenia, una empresa de informática de Córdoba que se dedica al desarrollo tecnológico y que ofrece todo tipo de servicios especializados en consultoría informática y mantenimiento informático (optimización, gestión, marketing online, posicionamiento web, etc.).
Mi hija dice que son buenísimos, ¡y lo que dice mi hija va a misa! La verdad es que me han diseñado una página web de la que estoy muy contento y satisfecho, una página que refleja a la perfección lo que mi esposa y yo queríamos transmitir, a saber paz y tranquilidad… Pues, nuestras casas trogloditas se encuentran rodeadas por una frondosa naturaleza, ubicadas en un entorno privilegiado: al pie de las montañas y pegadas al mar… ¡Mejor imposible! De hecho, si llevamos años alquilándolas, a pesar de no haber tenido hasta ahora Internet, ¡por algo será! Aunque debo reconocer que estos últimos años, con la crisis, las cosas se han ido complicado un poco.
Excelente posicionamiento en la web
Yo hasta hace unos meses no entendía absolutamente nada de términos informáticos. Para mí, eran anglicismos bárbaros incomprensibles y feos. Pero desde que tengo a mi negocio en la web, ¡y bien posicionado!, me voy poco a poco familiarizando con éstos, aunque sean los informáticos quienes se encarguen de reforzar la imagen de mi modesto negocio con diseños atractivos y dinámicos, adaptados además para los Smartphone y Tablet. Por mi parte, sólo me preocupo y de vez en cuando (con la ayuda de mi hija), soliendo coincidir con los cambios de estación, cuando la naturaleza se cambia de “vestido” y se envuelve en colores divinos (otoñales, invernales, primaverales, veraniegos), de transmitirles entonces fotografías del lugar para que las vayan incorporando a mi sitio web. Lo de poder ofertar mis viviendas en Internet no sólo era para atraer a más clientes, sino también y sobre todo para dar a conocer mi tierra de la que estoy perdidamente enamorado y orgulloso, porque estaba ya más que harto de escuchar que en España los turistas sólo venían para disfrutar del sol, de la comida barata y para emborracharse. Yo no estaba de acuerdo con ello y estaba convencido de que otro tipo de turismo era posible.
Pues, teníamos mucho por aportar y proponer aparte de sol, playa y paella. Disponíamos en efecto de un entorno maravilloso y encantador, nuestra tierra era asimismo históricamente hablando muy rica, con usos y costumbres increíbles y de otros tiempos que se seguían sin embargo celebrando en la actualidad. Con ello, nuestra gastronomía era exquisita y variada. ¡Nuestra tierra era auténtica y profunda! Por todo ello, teníamos que darla a conocer, tanto a nivel nacional como internacional. Y bueno… al hacernos mayores mi esposa y yo, teníamos que pensar en el futuro de nuestra hija y nieta. ¿Qué mejor legado entonces que el de transmitirles un negocio sólido, agradable, modernizado y con buenas perspectivas de futuro?
Porque debo especificar que desde que la empresa E-ingenia se ocupa de llevarme todos los temas de informática y de posicionamiento, ¡tengo mis casas alquiladas casi todos los fines de semanas, durante los puentes y vacaciones de verano! Desde hace un tiempo, vienen acudiendo incluso jóvenes españoles y extranjeros en busca de naturaleza y autenticidad, lejos del bullicio y falsedad de la ciudad. Ello me permite seguir creyendo y confiando en el género humano…